Jugar es una necesidad en cualquier niño y, si es al aire libre, tiene aún más ventajas. Te compartimos cuáles son los beneficios de jugar al aire libre.
A los niños les encanta el juego y es que no sólo es divertido, sino que es una necesidad en el desarrollo de nuestros pequeños, así que, entre más lo hagan, mejor. Jugar aporta muchos beneficios y, si es al aire libre, ¡tiene ventajas extras!
La interacción y convivencia con el exterior, la naturaleza y el medio ambiente es vital para un sano desarrollo y esparcimiento, ya que aprenden, desde pequeños, a relacionarse con su entorno.
Se recomienda a los niños jugar al aire libre al menos una hora al día. Aquí te decimos por qué:
- Ejercicio físico
Jugar en el exterior implica correr, saltar y trepar. Todas ellas implican estar en movimiento y es justo lo que tus peques necesitan.
- Estimula la creatividad
Estar afuera permite que los niños tengan que usar su imaginación. Crean historias, escenarios y personajes fantásticos con lo que tienen a la mano.
- Fomenta las relaciones sociales
Esta actividad contribuye a que desarrollen habilidades sociales. Interactúan, juegan, platican y pelean con otros niños de su edad.
- Unión familiar
Es una de las mejores formas de pasar tiempo en familia, lo único que hay que hacer es desconectarse del celular y jugar con ellos.
- Espacio multisensorial
La naturaleza es un gran lugar para experimentar el mundo. Está lleno de olores, paisajes, texturas, sonidos y sabores que les permitirá explorar y desarrollar su curiosidad.
- Se libera tensión
El contacto con el medio ambiente permite, por una parte, estar más relajado, sin tantas reglas ni normas; además, ayuda a liberar presiones.
- Exposición al sol
Estar en el exterior implica darse un baño de vitamina D, solo acuérdate de usar bloqueador solar.
- Reduce el riesgo de miopía
¡Interesante! ¿no lo crees?
Cuando haya mal clima, puedes darle la vuelta a la situación, abrígalo adecuadamente y aprovechen los charcos, la lluvia y la nieve.