Masaje infantil: Acariciar a tu bebé tiene un sinfín de beneficios, te compartimos porqué es tan importante tocar, abrazar y dar masaje a tu nene.
Cuando nos convertimos en padres, nos invaden un sinfín de dudas, sin embargo las madres intuimos varias de las respuestas. En ocasiones, sin conocer el trasfondo científico, simplemente hacemos cosas que funcionan con nuestros bebés y masaje infantil es una de ellas.
Es increíble cómo las caricias y el contacto aportan beneficios tanto para los bebés como para las madres, intensifican el amor entre padres e hijos y proveen seguridad. A través de las caricias y el tacto, comunicamos a nuestros bebés que estamos ahí para ellos, que los amamos, escuchamos y respetamos. A través del tacto se fomenta el amor, apego, calor, soporte, contención y sensaciones kinestésicas.
A continuación te dejamos algunos beneficios del masaje infantil:
- Estimula el sistema nervioso.
- Favorece el sistema respiratorio.
- Estimula el sistema gastrointestinal, contribuyendo al alivio generado por cólicos y gases.
- Estimula el sistema circulatorio al ayudar al retorno de la sangre al corazón.
- Estimula el sistema endócrino, ya que algunas hormonas se estimulan o inhiben por el masaje.
- Ayuda a relajar a los niños y favorece el sueño.
- Ayuda a eliminar tensión y eliminar estrés.
- Se favorece el vínculo entre el adulto y el bebé al propiciar el contacto de piel a piel, las miradas, sonrisas, abrazos, emisiones de voz y respuestas.
- Incrementa la confianza en los padres, ya que, debido al tiempo de convivencia, se aprende más acerca de las necesidades del niño.
- Fortalece el sistema muscular.
Antes de darle masaje al bebé, hay que pedirle permiso e interpretar las señales de nuestro hijo. Si está sonriendo, se siente cómodo, tiene las manos abiertas o hay sonidos verbales, nos indica que está abierto a recibir el masaje; si, por el contrario, llora, gime, se queja, se encoge, se arquea o se voltea, nos está comunicando que el masaje no es bienvenido y debemos aceptar si la respuesta fue negativa.
Ten en cuenta que, para que tenga mayores beneficios, deberás elegir el momento adecuado del día (para cada bebé es diferente, evita hacerlo después de comer), quitarte los anillos y pulseras para no lastimar, buscar un lugar cálido y crear el ambiente propicio, utilizar aceite para no irritar la piel del bebé y, sobre todo, disfrutar el proceso. El masaje es una manera en la que comunicamos nuestro amor, así que enfócate en conectar con tu bebé y deja fuera las preocupaciones por un momento.
Para dar masaje a tu hijo, debes buscar a un especialista que te enseñe la mejor forma de hacerlo, verás que, además de aportarle grandes beneficios, serán momentos de calidad para conectar con tu bebé.