¡Hola, hola!
Me presento, soy Ceci Varon y formo parte del equipo de Kapuyo.
Quiero compartir con ustedes un poco de mi experiencia ya que, gracias a Dios, fui bendecida con cinco hermosos pequeños: Yael, Yosef, Abraham, Margaret y Batia. Muchas personas me preguntan: “¿cómo? y ¿quieres más?”. La respuesta es sí, adoro a mis pequeños y me gustaría tener más.
Quiero platicarles que no siempre fue así, mis primeros años de mamá no fueron nada fáciles. Las mamás renunciamos a mucho para poder ser madres; a veces, es a una carrera, otras a un empleo, también puede ser a dormir una noche seguida, o hasta a entrar al baño con tranquilidad.
Empecé a tener a mis hijos muy chica y siempre buscaba el momento para estar “libre” o que mis hijos fueran “perfectos” para que yo no tuviera que sobre esforzarme. Claro que topé con pared, entonces, llegó la estrategia de ser ausente a ratos y luego ese sentimiento tan potente de culpa.
Ser mamá no es fácil, pero es de las cosas que más nos regalan ese dulce placer de satisfacción.
¿Cómo lidiar con toda esa carga? Por supuesto, con el apoyo de libros, artículos, talleres, cursos, terapia, etc.
Llegué a un punto de sobre exigencia extrema y una carga insoportable porque mi reto era ser una mamá “perfecta”. Lo que no entendía era que los seres humanos no somos ni podemos ser perfectos, pero de esta forma también está bien. Esa reflexión me ayudó mucho a entender que YO soy la mejor herramienta que tengo y que, tal como soy, soy la mejor mamá que mis hijos pueden tener.
¡En ese momento fue cuando empecé a disfrutar la maternidad! Mamitas, las entiendo a todas, entiendo nuestras dificultades, preocupaciones, el estrés y todo lo que conlleva este papel tan maravilloso. Sólo quiero decir que somos seres extraordinarios, que sí podemos con esto, pero es importante confiar en nosotras mismas y en nuestro rol, divertirnos, jugar, aprender y compartir momentos con nuestros hijos.
Nos enfrentamos a retos todos los días, algunos fáciles y otros cañones. ¡Nosotras somos nuestra mejor herramienta!
Alguien sabio una vez me dijo que la vida te hace madurar y entender que venimos al mundo a trabajar y que el trabajo nunca termina, a algunos nos toca trabajar por dinero, a otros por pertenecer a una sociedad, a otros por poder, a otros por ayudar a alguien más. Yo escogí trabajar y esforzarme por mis pequeños y creo que tengo tanto que darles que… ¡cinco hijos me quedan cortos!
Un abrazo a todas las mamás, ¡para ustedes creamos este espacio!
Con cariño, Ceci.