Los seres humanos somos curiosos por naturaleza, así que no es de extrañar que los niños pregunten acerca de la sexualidad y de dónde vienen los bebés.

Esta situación puede generar incomodidad en los padres por no saber qué contestar o preocupación por animarlos a comenzar relaciones sexuales de manera temprana. La realidad es que la información que no brindan los padres, los hijos la obtendrán de otras fuentes posiblemente menos fidedignas como internet, películas o amigos.

Además, una educación sexual oportuna ofrece a los niños información que puede prevenir el abuso y fomentar relaciones basadas en el respeto. Hay que  tomar en cuenta la edad y desarrollo de tu hijo para hablar de las cosas según su edad.

Si los niños hacen alguna pregunta responde con un lenguaje claro, con el que te sientas cómodo y sin mentir. Utiliza las palabras adecuadas para cada cosa empezando por nombrar al pene y a la vagina o vulva. Es válido decir que desconoces alguna cosa y que te informarás al respecto; no importa que no sepas todo, lo importante es que sepan que pueden acudir a ti cuando tengan dudas.

Puedes tomar en cuenta estos punto básicos para hablar de sexualidad de una manera respetuosa:

1. Normaliza y valida la pregunta de tu hijo. ¡Qué buena pregunta!, ¿por qué me estás preguntando esto hoy?
2. Pregúntale a tu hijo ¿qué crees tú?, así te darás cuenta a qué se está refiriendo y no darle información de más o de menos.
3. Contesta honestamente basándote en tus valores.
4. Pregúntale a tu hijo si entiende la respuesta, al hacerlo, te darás cuenta si comprendió la información que le brindaste.

Si tu hijo no te ha preguntado, puedes aprovechar oportunidades para hablar acerca del tema, por ejemplo, al ver a una persona embarazada o después de ver una escena en alguna película. Más que tener una “seria conversación sobre sexo” busca tener un proceso de descubrimiento gradual donde los niños aprendan a través del tiempo lo que necesitan saber.

La especialista María Ferrero en su libro “Cómo hablar temas complicados con los niños” sugiere que cuando los niños pregunten “¿de dónde vienen los bebés?” se pueden dar las siguientes respuestas: 

• Dependiendo de su edad puedes decirles que el bebé crece en una especie de huevito dentro de la barriga de mamá que luego de algunos meses sale por su vagina. 
• Si desean saber más sobre sexualidad, explícales que, cuando una mujer y un hombre se aman, les gusta estar juntos, se dan besos y abrazos entonces el papá pone una semillita en la madre que se juntará con una semilla de la madre, esta semilla irá creciendo en su barriga hasta transformarse en un bebé. 
• Otra posible respuesta sería: “cuando un hombre y una mujer se quieren mucho pueden convertirse en papás y tener un bebé juntos, es algo muy especial”. Esta respuesta será adecuada para los niños de hasta 6 años como suficiente por el momento. Si persisten busca libros que puedan ayudarte.
• Después de los 6 ó 7 años en lugar de semilla, sustituyelo por espermatozoide y óvulo.

A medida que crezcan, se irá ampliando y precisando la información, así que recuerda incluir el cuidado, responsabilidad, besos, abrazos, deseo, consentimiento, conocer al otro y las citas. De esta manera, se enseñará también a cuidar al otro, a respetarlo y comunicar que hacer bebés viene acompañado del cariño.

Seguramente surgirán nuevas preguntas, así que, a medida de lo posible, prepárate para contestarlas y mantener una conversación abierta acerca de estos temas. 

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